Río Grande (Desde las Bases).- Violeta Santander aclaró que “nosotros primeramente repudiamos, enérgicamente, lo que está pasando en algunos sectores en relación a estas denuncias de violencia de género en el ámbito laboral. En este momento, son muchas las denuncias que existen en distintos lugares, porque a veces las formas que usan para tratar a los compañeros, no son las correctas. Es algo que sucede todo el tiempo, nosotros queremos que este tipo de problemas se erradiquen”, aseguró la secretaria Adjunta de ATE Río Grande.

Por lo cual, remarcó que “como trabajadores, cuando se sufre algún tipo de violencia en las cuales podemos llegar a interferir o saber, tenemos que ir a realizar la denuncia a la policía y después de esto, llevar esta denuncia al Ministerio de Trabajo”, detalló.

Luego comentó que, desde ATE, se encuentran “pidiendo al Ministerio de Trabajo que tome cartas en el asunto de una vez por todas y arme una Oficina de Violencia Laboral, como corresponde dentro de la provincia. Esto es puntualmente porque las distintas denuncias que han surgido en estos últimos tiempos, tienen que ser sacadas fuera de la provincia, donde tienen que realizar estas denuncias en el Ministerio de Trabajo a nivel Nacional, ya que acá no existen respuestas para ninguna de las víctimas”, denunció.

Santander comentó que “ahora es únicamente lo administrativo, después están los pasos judiciales, donde las compañeras realizaron también las denuncias penales y civiles. ATE interviene cuando nos dan la potestad de querellantes, esto le deciden las compañeras y hacemos lo que tenemos que hacer, siempre y cuando los compañeros quieran. Por eso, nosotros pedimos con urgencia que se abra la Oficina de Violencia Laboral dentro de nuestra provincia”, insistió la sindicalista.

Luego enfatizó que “hacemos hincapié a que la Administración Pública incorpore la Ley Micaela, ya que es obligatoria, pero a su vez parece que no es obligación para el Ministerio de Trabajo hacer lo que corresponde, que consiste en tener un lugar donde se puedan efectuar estas denuncias pero que también recaiga una sanción. También, que este lugar cuente con comisarios que investiguen, que se sancione y en el caso de que esta denuncia no sea cierta, también exista una sanción para el que mienta”, remarcó.

Asimismo, recalcó que “con el ministro de Trabajo y Empleo, Marcelo Romero, hemos hablado de la creación de esta Oficina de Violencia Laboral, ya que está en sus responsabilidades. Calculo que debido a que hay mucho trabajo, no nos han convocados para poder hablar y llevar a cabo esta oficina tan esperada, la cual daría respuestas a toda esta problemática”, concluyó Santander.