Río Grande.- El domingo pasado, y en continuidad con los operativos encabezados por los Efectivos de la Sección Paso Internacional “San Sebastián”, dependiente del Escuadrón 62 “Río Grande”, en conjunto con personal de AFIP-DGA, Delegación “Rio Grande”, mientras realizaban controles en la Zona Primaria Aduanera (en el sector de ingreso), inspeccionaron un transporte de cargas Volvo tipo tractor con dormitorio y semirremolque (térmico) proveniente de la ciudad de Rio Gallegos (Santa Cruz).

Al momento de controlar el interior del rodado, con el apoyo de los canes antinarcóticos de Gendarmería Nacional “Ryden” y de AFIP- DGA “Zohan”, los funcionarios observaron que los animales reaccionaron como lo hacen habitualmente ante la presencia de estupefacientes al pasar por el sector de la cabina, por lo que llevaron a cabo una requisa más exhaustiva.

Los traficantes quisieron confundir a los perros con combustible

Lo confirmaron las autoridades de Aduana y Gendarmería que ayer lideraron una conferencia de prensa, brindado detalles sobre el procedimiento realizado el pasado domingo. Indicaron a ((La 97)) Radio Fueguina que “no necesariamente” este contrabando está vinculado al descubierto días atrás en la misma frontera, en ese caso con 5 kilos de la misma droga y de “máxima pureza”. Sin embargo, sí reconocieron como un hecho a destacar que, en un plazo de unos 20 días, se secuestren casi 16 kilos de cocaína que viajaban a Tierra del Fuego.

Además, con respecto a este estupefaciente, destacaron en esta oportunidad cómo venía acondicionada: era un ladrillo más angosto y no uniforme como se suele ver y además estaba termosellado varias veces.

Por otro lado, describieron que también los traficantes intentaron esquivar el olfato de los perros especializados utilizando “un material grasoso tipo combustible”, aunque ni siquiera esto logró superar la inspección profesional del can.

Como resultado de la inspección, constataron en el interior del compartimento porta equipaje ubicado sobre de la cama, un bulto con 10 paquetes rectangulares termosellados que contenían una sustancia blancuzca.

Integrantes de Criminalística y Estudios Forenses efectuaron las pruebas de campo Narcotest, las cuales arrojaron resultado positivo para cocaína de máxima pureza con un peso total de 10 kilos 670 gramos, cuyo valor asciende a los 32.010.000 de pesos.

En ese marco y a partir de las pesquisas, los Gendarmes y Agentes Aduaneros, montaron un operativo especial intensificando las actividades de control, aguardando la llegada de un segundo vehículo involucrado en la investigación del delito.

Al arribar el rodado, marca Peugeot 508 feline, los funcionarios procedieron a identificar a sus dos ocupantes, ambos masculinos y mayores de edad, a quienes se les incauto 3 dispositivos de telefonía celular, dinero en efectivo y distintos elementos vinculantes de interés para la causa.

En la ocasión, se halló en el baúl del vehículo 1 neumático que poseía un corte rectangular sobre su lateral externo, también utilizado en la maniobra delictuosa.

Se dio intervención al Juzgado y la Fiscalía Federal de la Ciudad de Rio Grande, quienes dispusieron la detención del conductor del camión y de dos ocupantes del automóvil, como así también, la incautación de todos los elementos que resultan cruciales para la continuidad de la causa.

En este operativo, los más de 10 kilogramos de cocaína secuestrados a partir de las estrategias articuladas entre ambas Instituciones, se suman a los 5,309 kilogramos de la misma sustancia incautados a principios de mes, que permitieron frenar el ingreso de estupefacientes a la provincia, destinado a su fraccionamiento para su comercialización al menudeo.