El Banco Mundial aprobó un préstamo para Argentina por un total de 900 millones de dólares, que será utilizado para financiar proyectos energéticos, de salud y de infraestructura.

El organismo emitió un comunicado en el que dio detalles del acuerdo, que es reembolsable en 32 años y cuenta con un período de gracia de 7 años.

La distribución del dinero será de la siguiente manera: 400 millones de dólares se destinarán para la ampliación del acceso a energía limpia y promoción de medidas de eficiencia energética en hogares y comunidades vulnerables; 300 millones de dólares a la mejora de la cobertura de servicios de salud de calidad; y los otros 200 millones de dólares a obras que mitiguen el riesgo por inundaciones en algunas ciudades vulnerables.

“Estamos acompañando a la Argentina con inversiones que ayuden a reducir su vulnerabilidad climática frente a las inundaciones y que permitan avanzar en la transición energética, de la mano de energías limpias y de una mayor eficiencia”, dice el comunicado del Banco Mundial.

En tanto que el ministro de Economía, Sergio Massa, también celebró el acuerdo que permitirá “avanzar en atender políticas que mejoren la calidad de vida de los sectores más vulnerables de nuestro país” y detalló a qué se destinará cada monto.

La distribución del dinero

El de 400 millones tiene como objetivo que las familias más vulnerables puedan abandonar viejos electrodomésticos y reemplazarlos por otros más sofisticados y eficientes, así como también que los clubes de barrio y los centros comunitarios puedan instalar iluminaciones de bajo consumo.

La línea de 300 millones de dólares apunta a financiar el Plan Nacional Integrado de Salud 2023-2028, que prevé una cobertura equitativa y efectiva de los servicios de salud para la población sin cobertura, junto con una mayor eficiencia

Por último, los otros 200 millones de dólares estarán focalizados en las zonas de Chaco, Formosa, Salta, Jujuy, Tucumán y Misiones, y en las provincias de Buenos Aires y Santa Fe, donde se ubican los principales asentamientos vulnerables a las inundaciones.